Estar en la buena senda
/Dentro del mundo del deporte, a veces se utiliza la expresión “estar en el carril”, que sería como decir “estar en la buena senda”, cuando los entrenadores percibimos que nuestro deportista, o equipo, están en el camino adecuado para conseguir su propósito.
¿Cuándo realmente los entrenadores vemos que están en el camino correcto?
En primer lugar, sucede cuando vemos que la gente está muy centrada en lo que hace y con buen ánimo; eso es lo primero y esencial. Se está en la buena senda cuando, desde el mayor de los realismos, se acepta la incertidumbre y lo desconocido sin miedo. Esa aceptación despliega la energía, la fuerza y el buen ánimo suficiente para generar una disposición interior y descubrir las soluciones que han de llegar, aun desconociendo por dónde y cómo.
Esta situación actual en la que nos encontramos todos es un buen momento para entrenar ese “estar en la buena senda”. Y eso es algo que solo depende de nosotros mismos.
Estar en la buena línea nos proporciona “beneficios seguros”. Cuando un deportista o equipo están en ese estado, consiguen siempre alguna de estas tres cosas: la victoria, el reconocimiento o la satisfacción personal. Cuando estás en la buena senda nunca se pierde, porque ganar no es lo que se ve desde fuera, sino lo que sucede dentro de cada uno de nosotros.
PD: Quiero dedicar este artículo a Bernardino Lombao -fallecido esta semana-, por su actitud vital y desacomplejada, que siempre fue beneficiosa para mí. El día de la final olímpica de Barcelona 92, mientras entrenaba en las pistas de atletismo de la Mar Bella, después de unos saltos de vallas que les hice hacer a las jugadoras, vino a mí y me dijo: “has hecho un trabajo fantástico”. Nunca lo olvidaré. Ante los temores propios previos a una final, él no necesitó la victoria para valorar mi trabajo. Eso es estar en la buena senda. ¡Gracias, Lombi!